CLASE DOMINICAL ROSACRUZ
CAPÍTULO IV
CLASES PARA EL MES SOLAR DE PISCIS
COMPRENDIDO ENTRE EL 19 DE FEBRERO Y EL 20 DE MARZO INCLUSIVE
UNIDAD es la palabra-clave básica del mes, es decir, sentir lo real de la UNIDAD de toda vida. Puede alcanzarse esta unidad armonizando la vibración individual con el ritmo cósmico. Con la sensación de unidad viene el deseo de cooperar en el plan de Dios y en consecuencia se obedece gustosamente la ley divina. A esto sigue el desarrollo de la compasión hacia los seres de otras oleadas de vida y se alcanza finalmente la unión con la divinidad, por medio de la liberación de la necesidad de tener existencia física. De este modo la palabra-clave individual de los diferentes Domingos constituyen una derivación de la palabra-clave básica.
Primer Domingo
CLASE SOBRE EL COSMOS
Palabra-clave: OBEDIENCIA
Hoy estudiaremos otra familia de Ángeles Estelares, el Signo Piscis. El símbolo que representa a Piscis se hace así: Ë(Dibújese el símbolo en el pizarrón). Dios nos mandó dos mensajeros desde Piscis: el hermoso Júpiter (Cuyo símbolo esä) y que nosotros podemos ver a menudo en el cielo al atardecer y el gran planeta Neptuno (cuyo símbolo esç) que está tan lejos que tenemos que mirarlo con un gran telescopio para poderlo ver. Júpiter nos está diciendo siempre: "SE BONDADOSO" y Neptuno nos dice: ¡Shit... Atención. Dios los está llamando!
Ustedes recordarán que cada familia de Ángeles Estelares nos está enseñando algo que debemos saber, antes de que las Rosas florezcan en nuestras Cruces. Y lo que los Ángeles de Piscis están tratando de enseñarnos es la OBEDIENCIA. Esto significa que debemos hacer lo que Dios nos pide que hagamos, porque Él sabe lo que es mejor para nosotros y lo que nos puede hacer felices. Él nos dió nuestra mamacita y nuestro papá, para que nos cuidaran mientras éramos niñitos chicos, por eso es muy importante que obedezcamos lo que nos dicen.
Yo quisiera enterarme si ustedes saben que cuando se portan bien producen un dulce sonido, algo así como una música, en el mundo de Dios. Los Ángeles Estelares son tan espléndidamente buenos y están tan cerca de Dios, que los pensamientos que ellos envían por el Universo, producen un sonido maravilloso. Cada pensamiento hace un sonido diferente; pero como ellos están trabajando juntos en el amor y al alegría, estos sonidos forman una música mucho más linda que todas las que hemos oído.
¿Saben ustedes que si uno de los Ángeles de Dios tuviera un pensamiento feo, todos los mundos serían lanzados de su sitio y chocarían entre sí y el Universo entero se estremecería, lo mismo que cuando en la Tierra hay un temblor? ¿Pero piensan ustedes que esto podrían hacerlo alguna vez? ¡De ninguna manera! Ellos aman tanto a Dios que de ningún modo podrían hacer eso.
Nosotros, los que vivimos en la Tierra, somos todavía demasiado pequeños para hacer pedazos el mundo de Dios con nuestros pensamientos; pero cada pensamiento malo que tenemos produce un sonido desagradable que nos lastima a nosotros y a todos los que están a nuestro alrededor. Esta es la razón porque Júpiter nos está diciendo: "Sé bondadoso" y el motivo porque Neptuno nos está murmurando siempre al oído "¡Shit, atención, Dios los está llamando!" Dios nos llama mediante esas hermosas notas de amor que los grandes seres están cantando y mediante el Querido Cristo Jesús, quien, como ustedes lo recuerdan está enviándonos en este momento su amor desde el centro de la Tierra. Dios, también nos está llamando con una vocecita que nace de lo más profundo de nuestros corazones y que nos dice si lo que estamos haciendo es bueno o es malo.
CLASE SOBRE LA BIBLIA
Palabra-clave: OBEDIENCIA.
LA MISIÓN DE SAN JUAN BAUTISTA
En los últimos Domingos, hemos estado estudiando el nacimiento y la infancia de Jesús. Aprendimos que Él debía preparar un cuerpo tan perfecto que el Gran Espíritu de Cristo pudiera descender a Él, cuando creciera. Éste iba a ser el más grande acontecimiento que había tenido lugar en la Tierra y los sabios de todos los países lo preveían. Pero había gente que no era sabia y a ésta había que enseñarle lo que iba a ocurrir, por eso , profesores y predicadores tuvieron que irles a decir que se prepararan para la venida de Cristo Jesús.
Uno de los más grandes de estos predicadores fué San Juan Bautista, que había estado muchos años en el desierto oyendo la Voz de Dios. Un día la Voz de Dios le dijo que debía salir a decirle a la gente que había llegado la hora en que Cristo Jesús vendría a salvar al mundo del pecado y del sufrimiento. ¿Pueden imaginarse un mensaje más importante que éste? Obedientemente fue Juan Bautista a darle a la gente la alegre noticia. Estaba vestido con un traje de pelo de camello, lo que quiere decir que el esplendoroso Vestido Dorado de Bodas, que ya hemos estudiado, rodeaba su cuerpo. Ataviado con este precioso traje, que él mismo había tejido mediante una vida pura, pudo ayudar a miles de personas. Los que podían ver el traje que San Juan tenía a su alrededor, se dieron cuenta de que era el mensajero elegido por Dios.
Por eso, no se sorprendan, de que cuando San Juan predicaba en las orillas del Río Jordán, miles de personas vinieran desde Jerusalem y desde todos los países vecinos, a Judea a escucharlo. Este admirable predicador les dijo que se arrepintieran de sus pecados, para que el Reino de los Cielos estuviese a su alcance. A los que se arrepintieron los bautizó en el río Jordán, a modo de una demostración de que habían sido lavados de sus pecados y purificados.
El bautismo también tiene otro significado, cuando el Espíritu de Dios entra en nosotros, es como un inmenso río de vida, en el cual nos bañamos. Entramos en este portentoso río cuando somos buenos, obedientes y nos esforzamos por trabajar con las leyes de Dios. Este sí que es un verdadero bautismo, el río de vida de Dios fluirá a través de nosotros y nos bañaremos en su infinita bondad y benevolencia. Este es el verdadero significado del bautismo. Cualquiera puede meterse dentro de un río, pero solamente aquel que es bueno y obediente, puede bañarse en el inmenso río de vida de Dios, por lo tanto, San Juan no podía bautizarlos a todos. Había fariseos y saduceos, que venían a escucharlo, pero éstos no podían ser bautizados. Hacían creer que eran muy buenos, pero eran realmente muy malos, por eso San Juan les dijo que le trajeran el fruto del arrepentimiento, lo que quería decir que primero debían sembrar la semilla de la bondad, el amor y la obediencia, antes de que pudieran ser bautizados en el magno río espiritual de Dios. Por eso, nosotros, debemos hacer lo mismo para conseguir el bautismo verdadero.
PREGUNTAS:
1.- ¿Acerca de qué gran predicador se ha hablado en esta clase?
2.- ¿Con qué iba vestido San Juan Bautista?
3.- ¿Qué es lo que era realmente, este vestido de pelo de camello?
4.- ¿Qué es lo que le contó Juan Bautista a la gente?
5.- ¿Cuál es el verdadero significado del bautismo?
6.- ¿Por qué no podía San Juan bautizarlos a todos?
7.- ¿Qué debemos hacer antes de poder obtener el bautismo
verdadero?
MÁXIMA DE ORO.- "Prepara el camino del Señor, aparta los estorbos de Su Sendero".
CUENTO PARA LOS NIÑOS
ROSALÍA Y EL RAYITO DE SOL
Una luminosa mañana de verano, se oían en el jardín las risas felices de los niños, había un júbilo extraordinario, el aire vibraba de felicidad, entre los niños había una linda niñita, que era muy chiquitita aún para intervenir en los juegos de los demás niños. Con su vaporoso vestidito blanco, con los ojitos que le bailaban y su linda carita sonrosada, adornada con dorados rizos, parecía más bien una flor que una niña.
Sonriente, feliz y contenta, estaba mirando un rayito de sol, que parecía estar jugando a su alrededor. El rayito de sol era tan brillante y bonito, que ella quería jugar con él. Trató entonces de cogerlo como pudo, corrió detrás de él de una parte a otra, hasta qeu se perdió de donde estaban los otros niños. En un momento estuvo a punto de dar caza al danzante rayito de sol, que estaba iluninando una flor. La flor era mun bonita, por eso Rosalía se inclinó a mirarla y a aspirar su perfume. Al hacer esto le pareció oír una voz muy finita que desde la flor se dirigía a ella. Al escucharla Rosalía le dijo: "¿Qué nombre tienes hermosa flor?, "Rosa", susurró la flor. "¿Y cuál es el tuyo linda niña?", "Rosalía", replicó la niñita. "¡Oh, qué lindo! dijo la vocecita, "Rosalía quiere decir rosa chiquitita".
"Por favor linda flor, ¿quieres seguir hablandome?" dijo Rosalía. "Bueno, como tú eres una rosita, te voy a llevar a dar un paseo en un rayito de sol, si tu me prometes ser muy, pero muy juiciosa y obediente". Rosalía lo prometió y salieron a dar un paseo.
¿A dónde creen ustedes que las llevó el Rayito de Sol? Pues las transportó a un jardín muy lejano donde crecían las flores más preciosas. Las flores alzaban sus cabezas muy altas, eran muy derechitas y estaban muy felices de poder agradar a todas las personas que pasaban por ese camino. Para eso son las flores, Dios nos las dió para alegrarnos con sus lindos colores, azul, amarillo, rojo y violeta y para dar existencia a muchos hermosos pensamientos que nosotros podemos tener en nuestras vidas. El amor, la paciencia y la obediencia, viven y respiran en las fragantes flores.
¿Qué otra cosa se imaginan ustedes que vieron mientras paseaban sobre el rayito de sol? Fué una sorpresa tan grande que la pequeña Rosalía contuvo el aliento y casi gritó de júbilo. Era un pequeño duende que trabajaba en pintar los colores de las flores. Su nombre era Duende Kin y tenía con él un pequeñito ayudante muy inteligente que se llamaba Do Kin. Había también una encantadora duendecita dama, con un vestido elegantísimo de arcoiris. Estaba posando de modo que el sol brillara sobre ella y Duende Kin estaba pintando una flor para que se le pareciera. Le puso a esta flor algo del azul del cielo, el oro del sol, el rojo de una puesta de sol, el verde del pasto y un poquito del café de la Tierra. Y ¡qué hermosa quedó la florecita!
¿Conocen ustedes los duendes? Ellos son unos espíritus pequeñitos que trabajan en las flores. Son unas diminutas criaturas, muy activas, que trabajan todo el tiempo con mucho ardor, en hacer flores, arbustos y árboles. Trabajan en pequeños grupos aprendiendo las lecciones que les dan los sabios Espíritus Grupos, que lo saben todo acerca de esa materia. Los Espíritus Grupos obtienen de los ángeles los preciosos pensamientos formas de las flores, los cuales los guían a ellos, así como ellos guían a los duendes. Todos trabajan juntos amorosamente en el hermoso mundo vegetal de Dios.
"¡Yo también quiero hacer hermosas flores!" dijo Rosalía. "Enséñame, por favor, cómo se hacen".
"Silencio, querida niñita", le dijo la vocecita de la rosa. "Duende Kin te va a oír y se austará al ver una niñita en su jardín. Tal vez va a pensar que tú eres un Duende Negro, un Gnomo, que quiere hacerle una broma mientras él está pintando esa hermosa flor nueva. Hay dos clases de Duendes. Los duendes de luz, que trabajan en las flores, dándoles la forma y pintándolas y los duendes negros o Gnomos, que trabajan en la tierra. Estos duendes negros son muy traviesos y les gusta mucho hacerles jugarretas a los duendes de luz. Sólo es por travesura; pero esto hace que Duende Kin esté siempre alerta y mirando por todas partes, porque no puiere que le dejen defectuosas sus lindas flores. Ya lo ven, es muy cuidadoso con sus flores, porque esa es una de las lecciones que ha aprendido. La Obediencia es otra lección, porque trabaja con ardor y con constancia, sin cesar, en lo que Dios le ha dicho que haga. Hacer flores es un trabajo para los Espíritus de la Naturaleza, no para las niñitas, pero también hay un trabajo para ustedes en el mundo de Dios. Tú puedes ser dulce y hermosa como una flor, porque tienes el nombre de una flor. También tú puedes dar júbilo y felicidad a todos los que te vean durante el día, especialmente a tu mamá, siendo obediente cuando ella quiere que tú hagas algo"
Entonces Rosalía se Despertó y el rayito de sol estaba aún jugando a su alrededor. Los alegres chiquitines jugaban todavía sus lindos juegos, se fué hacia donde ellos estaban, llevando con mucho cuidado a la linda rosa y les contó su viaje en el rayito de sol. Los niños la pusieron en el centro de una ronda le cantaron "Ronda a la Rosita" y creyeron más que nunca en los pequeños duendes y en los espíritus de la naturaleza.
Segundo Domingo
CLASE DE FILOSOFÍA
Palabra-clave: COMPASIÓN.
Repaso:
¿Qué es lo que nos están diciendo los Ángeles de Dios en este mes?
"Sé bondadoso" y también: "Shit, atención, Dios está llamando".
¿Cómo nos está llamando Dios?
Con la vocecita que hay en nuestros corazones que nos dice cuando
estamos procediendo bien o mal.
¿Qué lección especial aprendimos la semana pasada?
La gran lección de la Obediencia.
¿Han visto ustedes alguna vez una escalera muy larga, que llegue desde el suelo hasta el techo de una casa? ¡Claro que la han visto! Muy bien, en el mundo de Dios hay una escalera que llega desde el ser vivo más pequeño hasta el mismo Dios. Es la escalera de la vida y todos los seres vivos están subiendo por ella.
En el peldaño más bajo de esta escalera están las rocas, la arena, el hierro, el cobre y todas las cosas que forman nuestra tierra. Pero las rocas no pueden crecer ni moverse.
En el peldaño siguiente están los árboles, el pasto, las flores y las hortalizas. Todas las cosas verdes que crecen, hacen la tierra bonita y nos proporcionan alimentos para que comamos. Éstas están adelante que las rocas y la arena, porque pueden crecer y dar semillas de las cuales salen plantas chiquititas. Pero no se pueden mover porque tienen raíces que las sujetan firmemente al suelo.
En el peldaño que sigue en la escalera de la vida, están los animales. Están más adelante que las plantas, porque pueden moverse y crecer y tienen animalitos en vez de semillas.
¿Quienes suponen ustedes que están más arriba de los animales? ¿Puede adivinarlo alguien? Pero claro, ¡nosotros venimos después! ¿Y qué es lo que nosotros podemos hacer que los animales no pueden? Podemos pensar y expresar nuestros pensamientos con palabras. ¿No es verdad?
Hemos subido cuatro peldaños en la escalera de Dios; pero esta escalera continúa hacia arriba y hacia arriba, en cada peldaño hay algunos hijos de Dios que están más adelante que nosotros. En el peldaño siguiente más arriba de nosotros, están los Ángeles, los cuales nos cuidan y nos ayudan en muchos sentidos. En seguida vienen los Arcángeles, los Querubines, los Serafines y los extraordinarios Ángeles Estelares, que están ayudando a Dios a construir su hermoso Universo.
Todos estos Grandes Seres saben cuán grandioso es lo que está más arriba de nosotros y por eso quieren que nos apuremos y subamos al próximo peldaño. Ellos nos aman, nos traen los mensajes de Dios y nos ayudan lo más que pueden; pero ya lo ven, les es imposible hacernos subir. Somos nosotros mismos los que debemos hacerlo y podemos realizarlo tan rápida o lentamente como queramos. Si hubiéramos sabido lo que había en el próximo peldaño. ¡Caramba! ¡Cómo habríamos tratado de hacer lo que los mensajeros de Dios nos dicen!
Y ya lo saben, cuando uno de ellos diga "¡Sé bondadoso!", no solamente quiere decir que debemos ser bondadosos unos con otros, sino que también con todos nuestros hermanos menores, los animales y las plantas, porque amándolas y siendo bondadosos con ellos podemos ayudarles a subir más ligero la gran escalera de Dios, así como los Grandes Seres nos están ayudando a nosotros.
CLASE SOBRE LA BIBLIA
Palabra-clave: COMPASIÓN
EL BAUTISMO DE JESÚS
El Domingo pasado estudiamos al gran predicador Juan Bautista, vimos además cómo bautizaba a aquellos que estaban arrepentidos de sus pecados. Como ustedes recordarán, también les hablaba del grandioso acontecimiento que dentro de poco iba a tener lugar, la venida de Cristo Jesús a salvar al mundo de sus pecados y sufrimientos. Cuando predicaba les decía: "En verdad yo os bautizo con agua; pero vendrá uno que es más poderoso que yo, el cordón de cuyos zapatos yo no soy digno de desatar; Él os bautizará con el Espíritu Santo y con el fuego"
San Juan quería decir con el bautismo de fuego, que ese Gran Espíritu que se llamó Cristo, vendría hacia nosotros del sol, que como ustedes saben es un gran cuerpo de fuego, enormemente más grande que la Tierra. San Juan pertenecía a la Tierra, a la que pertenecemos también ustedes y yo; pero Cristo era un Gran Esíritu del Sol y vivía en el Sol. Ya pueden ver ustedes porque San Juan le dijo a la gente que Cristo sería capaz de bautizarlas con el fuego; pero que él solamente podría bautizarlos con agua.
Ahora bien, este Gran Espíritu del Sol, que llamamos Cristo, sabía que nuestra tierra necesitaba ayuda, sabía que la gente que vivía aquí era pecadora y que sufría horriblemente por sus pecados. Tuvo piedad de los pobres seres de la Tierra, porque era el más bondadoso y el más compasivo de todos los Espíritus que vivían en el Sol. Por eso quiso venir a la Tierra a ayudar a salvar a los que vivían aquí; pero este Gran Espíritu no tenía un cuerpo de carne, como el que tienen ustedes y tengo yo. Si hubiera tenido un cuerpo así, el Sol se lo habría quemado. En vez de tener un cuerpo como el nuestro, tenía uno mucho más sutil, tan sutil que no podría ser visto por los habitantes de la Tierra. Y aquí es donde estaba la dificultad. Cristo quería que la gente lo viera, lo sintiera y lo escuchara; pero sabía que no podría conseguirlo si viniera solamente con su cuerpo tan sutil. La gente no habría sabido que El estaba en la Tierra.
¿Cómo creen ustedes que Cristo consiguió que la gente lo conociera? Bueno, fué traído para Él, un cuerpo de carne y hueso tal como el que tienen ustedes y tengo yo, pero mucho más puro y bueno en todo sentido que el nuestro. ¿Y quién creen ustedes que construyó ese cuerpo? ¡Pero claro, sí, ustedes lo saben!, porque fué el niñito Jesús, al cual nos hemos estado refiriendo todos estos Domingos. Y Jesús estaba perfectamente enterado de ello, sabía que cuando creciera le iba a dar su cuerpo al Gran Espíritu de Cristo. ¡Y qué feliz era por eso!, ya que estaba impuesto que solamente así, la gente podría salvarse.
En el tiempo en que San Juan Bautista estaba predicando en Judea, Jesús había cumplido los treinta años de edad. Sabía que ya había llegado el momento para que Cristo llegara a la Tierra, por eso se fué donde San Juan para que lo bautizara en el río Jordán. Y allí ocurrió el acontecimiento grandioso, a que ya nos hemos referido. El Gran Espíritu Solar de Cristo, descendió sobre Jesús en la forma de una paloma y desde ese momento el cuerpo de Jesús fué usado por Cristo, el cual fué conocido desde entonces como Cristo-Jesús. Cada palabra hablada por este cuerpo, desde ese entonces, fué pronunciada por este bondadoso y compasivo Espíritu Solar. En toda la historia del mundo, por millones y millones de años, nada semejante ha tenido lugar. Que un Gran Espíritu Solar haya venido a la Tierra a salvar a la gente que sufría tan espantosamente debido a sus pecados y no solamente a la gente que vivía en ese tiempo, sino que también a aquellos que han vivido en la Tierra desde entonces o vivirán más tarde en ella. No debemos olvidar nunca este gran acontecimiento y debemos hacerlo todo en el nombre de Cristo Jesús, el Señor de la Bondad y la Compasión
PREGUNTAS:
1.- ¿Quién era el Gran Espíritu que San Juan dijo que vendría a
bautizar con fuego?
2.- ¿De dónde vino Cristo?
3.- ¿Por qué vino a la Tierra?
4.- ¿Qué es lo que debía tener antes de que pudiera ser visto en
la Tierra?
5.- ¿Quién le proporcionó a Cristo su cuerpo terreno?
6.- ¿Cuándo tomó posesión Cristo del cuerpo de Jesús?
7.- ¿Con qué nombre fué conocido Cristo, después del bautismo?
MÁXIMA DE ORO: "Este es mi hijo bienamado, en quien he puesto toda mi complacencia".
CUENTO PARA NIÑOS
FRANCISCO
¿Han visto alguna vez ustedes el cielo tan azul, pero tan azul, que han sentido deseos de sentarse a mirarlo durante todo el día? Algo en su interior canta de júbilo, se sienten danzar en el espacio y se ponen muy alegres. Bueno, ¿saben ustedes queridos niños, que el azul del cielo es una de las maneras como nuestro Padre querido que está en los cielos, nos proporciona felicidad en nuestro hermoso mundo? ¡Sí, así es, efectivamente!, por eso es que cuando miramos el lindo cielo azul, podemos ser realmente felices.
En un lejano país que está más allá del océano, bajo un cielo hermosamente azul, hace muchos años vivía un niñito. También le gustaba el cielo azul, porque al mirarlo su corazón se ponía contento, feliz y alegre. Su nombre era Francisco. ¿No les parece que es un nombre bonito? Este niñito Italiano, que había nacido en la soleada Italia, era como los otros niños, lleno de vida y deseando siempre divertirse. Su padre era un rico comerciante y por eso Francisco podía obtener todo lo que quería, todo lo que su pequeño corazón deseaba. Sus trajes eran tan lindos, que algunos de sus compañeros de juego lo miraban con envidia y decían: "Es como un príncipe". Esto, naturalmente, ponía muy orgulloso al padre; pero hacía que su sabia mamá se sintiera triste a veces, porque sabía que no es bueno para los niñitos que tengan todo lo que desean, porque casi siempre se ponen egoístas. Y ya lo saben ustedes, queridos niños, el egoísmo no es nunca una cosa bella y siempre es desagradable.
Muy bién, Francisco continuó siendo alegre y egoísta, hasta que un día algo sucedió. Francisco tuvo una grave enfermedad. Esto ocurre muy seguido, cuando no pensamos en otra cosa que en el placer y nos hacemos amigos del egoísmo. Sin embargo, su encantadora mamá, que lo comprendía tan bién, lo cuidó con un profundo y tierno amor maternal. Elevó sus oraciones al Padre Celestial. También los Ángeles fueron los que le llevaron estas oraciones al Padre Celestial. También los Ángeles cuidaron a Francisco y le enviaron sus pequeños mensajeros de amor para que su cuerpo se curara. Estos mensajeros le despojaron el cuerpo de todas las cosas desagradables que habían estado viviendo dentro de él y en su lugar colocaron solamente amor, pureza y dulzura.
De esta manera, se puso poco a poco más fuerte. Durante su larga enfermedad el Egoísmo también había estado enfermo y nunca se volvió a reponer. Cuando ya Francisco estuvo completamente repuesto, la Generosidad vino a ocupar el lugar que antes tenía en su corazón el Egoísmo. En repetidas ocasiones la Generosidad le sugirió pensamientos tan amorosos, que pronto Francisco empezó a ver cosas que nunca había visto.
Cuando era un egoísta, todo el tiempo estaba pensando en sí mismo y buscando algo qué hacer para pasar un momento agradable. Jamás pensaba en otro. Como estaba ensimismado, no veía lo que estaba ocurriendo a su alrededor y por eso no comprendía muchas cosas.
Ahora, sin embargo, como seguía los dictados de la Generosidad, empezó a encontrar nuevas alegrías. Su amor se hizo tan grande que llegó a querer a todos los seres vivos y su mayor felicidad radicaba en ser bondadoso para con los demás. Por último, llegó a estar tan lleno de amor, compasión y bondad, que recibió el nombre de "San Francisco".
Fué un verdadero amigo de los pajarillos, de los árboles y arbustos. Siempre le hablaba a las abejas que volaban de flor en flor, en el jardín y a los conejitos que saltaban alegremente junto con sus hermanos. Los pajarillos comprendían lo que él les decía y no le tenían el menor recelo, sino que gorjeaban y cantaban en respuesta a lo que él les decía. Cuando lo veían venir, le cantaban sus canciones más dulces y armoniosas, porque sabían que él las entendía. Entonces San Francisco decía: "Nuestros hermanos, los pajarillos, están dando gracias a Dios".
Su encantadora mamá estaba muy feliz con esto, porque siempre había sabido que , oculto en lo más profundo del corazón de su hijo, existía este precioso amor por la naturaleza y que algún día saldría radiante al exterior, para que todos se impusieran de lo que ya sabía. Cuando San Francisco era aún un alegre muchacho, ella había dicho: "Si ahora él vive como un príncipe, después de eso será llamado hijo de Dios". ¡En verdad que era un hijo de Dios! Y cada uno de nosotros lo somos también. ¿No les parece maravilloso?
Todos los habitantes del mundo de hoy, hablan amorosamente del buen San Francisco, el amigo de los pajarillos, los animales, las flores y todo lo existente.
¿Dónde está San Francisco en la actualidad? Vive en ese hermoso mundo que está más allá del cielo inmensamente azul, con nuestro Padre Celestial y es conocido como uno de los "Seres Compasivos"
Tercer Domingo
CLASE DE FILOSOFÍA
Palabra-clave: LIBERACIÓN
Repaso:
¿Qué es lo que los Grandes Seres nos están diciendo este mes?
"Sé bondadoso" ¡Shit; atención! ¡Dios los está llamando!
¿Cuál es la escalera que todos estamos ascendiando?
- La escalera de la vida.
¿Cómo debemos tratar a nuestros hermanos menores, los animales
y las plantas?
"Debemos amarlos, ser bondadosos con ellos, para ayudarlos a
subir más ligero la escalera de Dios.
Hoy voy a contarles algo que ustedes no saben. Cada una de las grandes familias de Ángeles Estelares nos ha ayudado a construir una parte de nuestro cuerpo y nos está ayudando a conservar esa parte en buenas condiciones. Hay doce familias de Ángeles Estelares, por eso el cuerpo que tenemos, es como una casa que tiene doce departamentos. La Luz
que son ustedes, vive en esta casa y dirige a los millones de pequeños trabajadores que se llaman células y que cuidan cada uno de los departamentos. Todas estas celulitas, están tratando de hacer su trabajo, en los diferentes departamentos, en forma perfecta y cada una de ellas entona la nota de los diferentes departamentos. Todas estas celulitas, están tratando de hacer su trabajo, en los diferentes departamentos, en forma perfecta y cada una de ellas entona la nota de amor de la familia de Ángeles Estelares a la cual pertenece, de manera que todo nuestro cuerpo puede estar en armonía con la hermosísima música del mundo de Dios.
Ahora bien, la parte de nuestro cuerpo que los Ángeles Estelares de Piscis nos están ayudando a construir, son los pies. También son una parte importante. ¿No les parece? Todo el cuerpo se sustenta sobre ellos y si no tuviéramos pies, no tendríamos como pararnos. Los mensajeros de Piscis nos están enseñando a ser bondadosos y a escuchar siempre lo que Dios nos está diciendo. Estas verdades son como los pies, porque nos sostienen en todo lo que hacemos y sin ellos no podríamos hacer nada que valga la pena.
¿Qué suponen ustedes que sucede en nuestra casa de doce departamentos cuando somos poco amables y tenemos pensamientos de ira? Voy a contarles lo que sucede. El dasagradable sonido que hacemos al realizar tales cosas, se difunde por los doce departamentos e impide a los pequeños trabajadores celulares que escuchen los encantadores sonidos que los Ángeles Estelares están haciendo. Esas son las notas que deben sonar en nuestro cuerpo para mantenerlo funcionando bien. Si continuamos haciendo cosas malas o teniendo malos pensamientos, lo primero que ocurre es que esos pequeños trabajadores llamados células, se sienten completamente confundidos y no saben qué hacer. Entonces las cosas empiezan a echarse a perder en nuestra casa y es eso lo que nosotros llamamos estar enfermos.
Pero cuando las Rosas hayan florecido sobre nuestra Cruz, cuando hayamos aprendido a hacer todas las cosas que los mensajeros de Dios nos están tratando de enseñar, entonces esa hermosa música que están ejecutando los Ángeles Estelares, será ejecutada por los pequeños trabajadores de nuestra casa de doce habitaciones y no nos volveremos a enfermar jamás.
CLASE SOBRE LA BIBLIA
Palabra-clave: LIBERACIÓN
JESÚS, EL HERMANO MAYOR
Hace varios Domingos que estamos hablando sobre dos grandes hombres:
San Juan Bautista y Jesús, el hijo de María y José. Nacieron más o menos en el mismo tiempo y ambos realizaron una grandiosa labor en el mundo. Ustedes recordarán que la gran obra que realizó San Juan Bautista fué predicar al pueblo de Palestina, la venida del Espíritu Solar Cristo.
Ahora bien, ¿quién recuerda para hacer qué obra nació Jesús? Indudablemente que lo recuerdan; pero voy a contárselo de nuevo, para que no lo olviden nunca. Jesús construyó un cuerpo perfecto para el Gran Espíritu Solar Cristo, quien en realidad era más grandioso que un Ángel ya que era Arcángel, que quiere decir más grande que un Ángel.
Ustedes saben indudablemente que un árcángel no puede ser visto por todos y por eso es que Jesús tuvo que construir un cuerpo para Cristo. Lo hizo con el fin de que este glorioso Arcángel pudiera entrar en él y enseñar a los hombres lo que, ni Jesús, ni San Juan Bautista, podían enseñar.
La labor de Jesús terminó después que le dió este cuerpo perfecto a Cristo, por eso es que quedó libre o liberado de su cuerpo de carne. Aun cuando el cuerpo de Jesús era el más perfecto que se hubiera hecho jamás, de todos modos era un cuerpo de carne y hueso y, como tal, estorbaba o apretaba al espíritu que estaba en su interior. Es como si una gran piedra sujetara sobre la Tierra al Espíritu, que es el verdadero Yo. Pero esto está bien, así debe ser, porque necesitamos un cuerpo de carne y hueso, para poder realizar nuestra labor y aprender nuestras lecciones aquí en la Tierra. Sin embargo, cuando hayamos terminado nuestra labor y hayamos aprendido nuestra lección, llegará el momento en que debemos abandonar nuestro cuerpo. El Espíritu, que es el verdadero Yo, sale del cuerpo y se va hacia el cielo. Esto es lo que se llama liberación. Algunas personas lo llaman muerte; pero realmente la muerte no existe. El Espíritu, el verdadero Yo, no muere jamás. Solamente se saca el cuerpo, así como ustedes se sacarían el paletó y se va hacia los mundos celestiales.
Estos mundos están a nuestro alrededor; pero son tan sutiles que no los podemos ver. Eso fué lo que le ocurrió a Jesús cuando hubo dado su cuerpo a Cristo, fué liberado, y se le dió en el cielo un trabajo aun más importante que el que había hecho en la Tierra. Se ha convertido en el más grande de los Hermanos Mayores. Ya no podemos verlo con nuestros ojos físicos; pero está trabajando entre nosotros de la misma manera que lo hacía antes y, algún día, lo veremos con los ojos del Espíritu. Debemos amarlo con todo nuestro corazón, porque por su intermedio pudo el Gran Espíritu Cristo venir a la Tierra, a salvar a la humanidad.
PREGUNTAS:
1.- ¿Para hacer qué trabajo nació Jesús?
2.- ¿Quién era Cristo?
3.- ¿Qué sucedió en el bautismo?
4.- ¿Qué le sucedió a Jesús después del bautismo?
5.- ¿Qué nos sucede a nosotros cuando nuestra labor está teminada?
6.- ¿Qué es lo que la muerte significa realmente?
MÁXIMA DE ORO: "Ninguno viene hacia el Padre sino por mí".
CUENTO PARA LOS NIÑOS
LA BELLEZA DORADA
Érase una vez un camino cerca del cual creció una planta que nadie notó. Ocultos bajo una de las hojas de esta planta, había una docena de minúsculos huevitos, tan pequeños que si no hubieran sabido donde estaban no los habrían podido ver. Después de un momento salió arrastrándose de uno de los huevos, ¡adivinen qué! Un pequeño gusanito verde. Estaba muy contento de haber salido. En seguida se estiró una y otra vez, miró a su alrededor y empezó a arrastrarse de nuevo. Se arrastró y se arrastró cada mez más lejos. Todos los días comía con tanto apetito, que muy pronto tuvo que usar un nuevo traje. Pasaba unos momentos muy felices en la planta que estaba cerca del camino. Era un gusanito muy inteligente; si el viento soplaba muy fuerte e inclinaba demasiado las hojas, se dejaba caer al suelo, cuando todo estaba nuevamente tranquilo, se arrastraba por el peciolo en direcicón a alguna agradable hoja verde.
Bien, este gusanito se arrastró y comió tanto, que pronto ya había usado cuatro nuevos trajes verdes. Un día, como era muy arrogante, se olvidó de quitarse de la vista, en vez de hacerlo se arrastró con temeridad por donde se le podía ver perfectamente y un hombre que lo vió, dijo: "Un gusano realmente hermoso, el mejor de su especie que yo he visto". Entonces los espíritus de la naturaleza, que trabajan en los gusanos, oyeron estoy y se lo dijeron al Espíritu Grupo. Desde entonces el gusano verde fué vigilado muy cuidadosamente para evitar que le ocurriera algo.
Una vez, después de arrastrarse muy lejos y de haber quedado muy cansado, se deslizó bajo la hoja más grande que pudo encontrar. En seguida, para estar lo más confortablemente posible, tejió un emparrillado o cuna para él, con los sedosos pelitos que había en el lado inferior de la hoja. Después de colocarse dentro, muy contento y feliz, se quedó dormido y ¡qué les parece, estuvo durmiendo dos semans sin despertarse! Durante este profundo sueño, los espíritus de la naturaleza lo ayudarona a crecer más, hasta que, finalmente, llegó a ser demasiado grande para su cuna. Después de un día brillante y caluroso, rompió su cuna y salió fuera la más hermosa mariposa dorada. El gusano había sido liberado de sus envolturas.
A la mariposa le agradó mucho la linda florecita silvestre que crecía cerca de la hoja que había sido su hogar y regocijándose con el dulce aroma que le traía la suave brisa, la mariposa descansó un momento.De repente se dió cuenta que tenía unas alas tan lindas, como si fueran de puro oro y con un grito de júbilo voló sin dificultad bajo el precioso sol. Después de volar un momento, revoleteó sobre un hermoso jardín y se posó sobre una flor de trébol. Y como tuvo sed, ¿qué creen que hizo? Desenrolló la larga lengua que tenía envuelta bajo la barba y tomó un sorbo de néctar. ¡Qué feliz se sentía! Y hacía que las flores fueran felices también porque era como la luz del sol volando de una flor a otra.
"¡Qué esplendida mariposa dorada, cacémosla!" dijo un joven que la había observado volar por entre las flores. A él le gustaban mucho las mariposas, pero no pudo lograr cazarla. ¡Cómo la iba a cazar!, cuando los espíritus de la naturaleza la guiaron a una gran hoja verde y la escondieron allí. Después puso algunos minúsculos huevitos y entonces desplegó sus hermosas alas doradas y voló lejos, muy lejos y nadie la volvió a ver de nuevo.
¿Qué sucedió? Es un secreto de la naturaleza. Pero cuando haya aprendido todas las lecciones que las mariposas deben saber, será algún día un pajarillo y volará muy arriba, siempre aprendiendo nuevas lecciones en el jardín de la vida que tiene Dios.
Domingo de Servicio
El último Domingo de cada mes solar se celebra el "Domingo de Servicio". En esta oportunidad se usa una rosa blanca en el centro del Emblema, además de las siete rosas rojas.
Para los detalles sobre el programa a desarrollarse en este Domingo, consultar:Capítulo 1 : Instrucciones Generales